martes, 14 de agosto de 2012

QUERERTE


Te quiero, distante y todo.
Te quiero, con caricias o sin ellas.
Te quiero, me extrañes o no.
Te quiero, me pienses o no.
Te quiero, estés aquí o allá.
Te quiero, con defectos o sin ellos.
Te quiero, aunque no me creas.
Te quiero, a pesar de que no se lo pueda gritar al mundo entero.
Te quiero, sin más.
Te quiero, cuando mi sonrisa se contagia de la tuya.
Te quiero, por tus ojos.
Te quiero, por tu cabello.
Te quiero, por tu espalda.
Te quiero, porque te quiero.
Te quiero, sin importar cuánto me quieras.
Te quiero, porque me acompañas.
Te quiero, porque me susurras un te quiero al oído.
Te quiero, sin conocerte un cien por ciento. 
Te quiero, me hables o no.
Te quiero, me huyas o no.
Te quiero, estés cerca de mí o no.
Te quiero, como nunca antes quise a alguien.
Te quiero, porque me haces bien.
Te quiero, porque te veo y mi día cambia de color.
Te quiero, porque nadie te quiere como yo.
Te quiero, porque tienes tiempo para mí.
Te quiero, me quieras o no.
—Mireya López.

miércoles, 8 de agosto de 2012

ESTAR CONTIGO

Aunque nos veamos todos los días y nunca nos hablemos.
Aunque nos comuniquemos con solo miradas.
Aunque a veces huyas de mí y yo huya de ti.
Aunque me paralice el miedo de pensar mucho en tu voz.
Aunque mi nombre no se lo susurres a nadie.
Aunque tus sonrisas no sean mías.
Aunque no sueñes conmigo.
Aunque no esperes que te hable.
Aunque no vivas tan pendiente de mí como yo de ti.
Aunque nunca hayas tomado la iniciativa para hablarme.
Aunque hables más duro cuando estoy cerca sólo para hacerme voltear a verte.
Yo quiero estar contigo.
Porque tan solo verte me hace suspirar.
Porque tu apellido se me olvida de vez en cuando.
Porque quiero conocerte.
Porque eres diferente a todas las demás.
Porque me buscas sin decirlo y te preocupas por mi bien.
Porque te das cuenta de mi ausencia.
Porque me quieres aunque no me conozcas.
Porque tienes buena ortografía.
Porque no me has decepcionado.
Porque tienes esa mirada tímida y retadora que me fascina.
Porque volteas la cabeza cuando soy yo quien te quiere mirar.
Porque a pesar de que le tienes miedo a intentarlo, lo tratas de ocultar y lo intentas.
Porque mereces que alguien te quiera.
Porque confío más en ti que en muchas personas que me rodean.
Porque te extraño cuando no estás.
Porque quiero que mis te quiero sean sólo para ti.
Yo quiero estar contigo, sólo contigo.
—Mireya López.